¿Os acordáis de éste par de adorables hijos de puta?
Pues ahora le ha tocado vengarse al de las gafas, tras la putada de la canasta de medio millón de dólares.
Es fácil; básicamente se trata de hacer creer a su 'colega' (previo pago al instructor) de que no tienen paracaídas y bueno... descojónense a placer:
Gracias a Zanti, el Hank Moody de Salobreña, por el enlace.
Why Republicans can’t stop hiding behind fake names
Hace 13 horas
3 comentarios:
Gracias, es lo mas bonito que me han dicho nunca.
Algún día llegaremos a este nivel de bromas. Algún día.
Hijodelagranputa el flipy!!! jajajajajajaajajjajajajaja...esto es la vida!(y nunca mejor dicho!)
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